El Museo Nacional de Ciencia y Tecnología, MUNCYT, de Alcobendas, se suma a la difusión de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 de la ONU -que constituyen un llamamiento universal a la acción para poner fin a la desigualdad-, con actividades especiales para Semana Santa en las que se dará a conocer su colección de patrimonio científico y técnico.
Con distintas piezas del Museo se ilustrarán varios de los 17 ODS, destacando cómo la ciencia, la tecnología y la innovación son instrumentos imprescindibles para la inclusión, la diversidad y la igualdad.

La directora del Museo Nacional de Ciencia y Tecnología, MUNCYT, de A Coruña, Marina Martínez de Marañón, ha presentado hoy la nueva pieza que ocupará el espacio “Nuestros Donantes”. Se trata del Canon Communicator, un dispositivo electrónico de comunicación entre personas que permite al usuario mecanografiar mensajes de la longitud que se desee en una cinta de papel.  A la presentación ha acudido también la donante de esta pieza, Maria José Díez Seoane, que la adquirió el 29 de mayo de 1989. Este dispositivo estará expuesto en el MUNCYT durante todo el año 2022.

El Museo Nacional de Ciencia y Tecnología, MUNCYT, ha presentado en su sede coruñesa, el espacio “Piezas con memoria”.
En el acto de presentación participaron la directora del MUNCYT, Marina Martínez de Marañón, así como Berto Seone y Enrique Marchesi-Herce, pilotos que tuvieron la ocasión de comandar el Jumbo que se expone en el MUNCYT, y Jorge Formoso, donante del laboratorio Formoso y químico, e hijo de Antonio Formoso una de las personas más importantes de la Química en nuestro país.

La sección de Tecnodiversidad está dedicada a exponer herramientas manuales con las que se quiere poner de manifiesto cómo el desarrollo tecnológico nos ayuda en la vida cotidiana, y cómo las herramientas también se adaptan al medio y se transforman para realizar labores específicas. Ahora contiene una amplia muestra de galluzas y maquinarias de bronce, caoba y nogal muy elaboradas de los siglos XVIII y XIX que permitían la fabricación de los relojes.